Jubilados (y sueldos): el ajuste Mostaza Merlo, del que nadie habla

Fuente: Ole.com.ar

El INDEC acaba de dar a conocer el aumento del IPC nacional durante marzo de este año: fue del 6,7%. Con ese incremento, la inflación de los últimos doce meses resultó del 55,1% y en el primer trimestre de este año el costo de vida (nacional) subió un 16,1%. Nada para celebrar.

En todos los medios se está analizando el ajuste que tiene a un importante grupo de jubilados (que tengo el honor de integrar) como protagonistas: nos aumentaron, en el trimestre, solo el 12,28%, con una inflación del 16,1%.

Ya sabemos que el realismo mágico de la inflación permite al gobierno decir “te subimos tu ingreso”, cuando en realidad es un “te la bajamos” (a la remuneración, en términos reales o de poder adquisitivo).

Este punto está claro y hay consenso en que buena parte de los jubilados sufrimos este “ajuste”, del que el Estado dice salvar a los de ingresos menores, con un generoso bono de 6.000 pesos o algo menos, según el caso.

El ajuste Mostaza Merlo

¿Y cuál es el ajuste del que nadie habla? El Mostaza Merlo o el del paso a paso, por la frase que se popularizó con la campaña del Racing campeón del 2001.

Vayamos despacio. Supongamos que, al fin del trimestre, tu jubilación (o sueldo, lo mismo da) sube lo mismo que la inflación. ¿Eso quiere decir que no fuiste víctima del ajuste por la inflación? No.

¿Y por qué no? Pues el aumento de los precios es un proceso continuo y no discreto. No se da todo de golpe, el último día del trimestre. Y el gobierno va beneficiándose de esa inflación, recaudando, por ejemplo, cada día un poco más de IVA (por aumento de precios). Gana con el impuesto inflacionario el Banco Central (BCRA). Los billetes que circulan valen menos.

 ¿Y entonces? Desde el primero de los días del trimestre empezaste a ser víctima del ajuste. Porque cuando cobraste la remuneración del primer mes (yo cobro el último o penúltimo día hábil, a mes vencido), los precios ya subieron.

Con el sueldo o jubilación de diciembre (dejemos de lado el medio aguinaldo), encaraste los gastos de enero. Y ahí ya perdiste.

Y con el ingreso de enero (o febrero), garpaste (permitime el lunfardo) las erogaciones de febrero (o marzo). Y cada día fuiste perdiendo.

Cuantifiquemos las pérdidas

En el primer ajuste, el que todos comentan, el del aumento del 12,28% contra una inflación del 16,1%, podés decir que faltó un aumento de 3,8% adicional para empatar el partido.

Esa pérdida la comentan (y cuantifican) todos. Y es cierta. Y se siente en el bolsillo. Pero no es la única.

Intentemos cuantificar, aproximadamente, la pérdida por el “Mostaza Merlo”, la del ajuste silencioso.

En el primer mes, en enero de este año, ya perdiste. ¿Cuánto? En promedio, digamos (aunque no sea exactamente así), la mitad de la inflación de enero. ¿Por qué la mitad? Pues suponemos que todo ocurre como si los gastos los hubieras abonado, en promedio, el día 15 (o el 16).

¿De cuánto fue la pérdida aproximada por enero? Del 1,95%, la mitad del 3,9% de inflación del mes. O sea que si cobraste la jubilación mínima, en enero perdiste $ 567 (el 1,95% de los $ 29.062).

¿Y en febrero? Ahí la pérdida es mayor. Surgiría, aproximando, de combinar (es interés compuesto) la inflación de enero con la de medio febrero. ¿Y eso cuánto da? Un 6,3%. O sea que si cobraste la jubilación mínima, en febrero perdiste $ 1.843.

¿Y en marzo? Con un razonamiento análogo, del 12,4% o $ 3.612, para los de la mínima.

¿Y entonces? Todos perdimos con el “paso a paso”. En el caso de los que cobraron la jubilación mínima, la pérdida del trimestre por el «Mostaza Merlo» (expresada en pesos de cierre del trimestre) fue de $ 6.391.

Recordatorio al gobierno: ni con el bono (que recién se cobrará entre el 18 y el 29 de abril) los jubilados de menores ingresos «empatarán el partido».  

Cierre

En períodos de alta inflación, como el actual, la pérdida por el “paso a paso” o «Mostaza Merlo» es importante. Y más significativa, cuanto mayor sea la inflación y más espaciados estén los aumentos de remuneraciones.  

¿Estoy proponiendo ajustes mensuales? No. Indexar la economía no es gratis, acelera la inercia inflacionaria.

Ojalá algún gobierno se proponga, y logre, reducir la inflación en serio. Ese debería ser el objetivo.

Por ahora, en la Argentina, los sindicatos están cerrando paritarias cada vez “más cortas”. ¿Por qué? Por el paso a paso. Los sindicalistas la tienen clara.

Pero no hay sindicato de jubilados. Ni de contribuyentes.

Agradezco a mi amigo, el Ing. Eduardo Pose, sus valiosos aportes para este posteo.

Hasta la próxima.

11 thoughts on “Jubilados (y sueldos): el ajuste Mostaza Merlo, del que nadie habla

  1. Cómo de costumbre muy claro y actual tu comentario Carlos. Que estas Pascuas te renueven en todo lo que sea posible y estés muy bien. Un fuerte abrazo!!

  2. Coincido con Daniela (sin conocerla en persona personalmente), esto es técnicamente cierto y triste. El humor … bueno mencionar al «genio» de Mostaza Merlo tiene su parte. Sigamos! (no, siganme! eso lo dijo otro)

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