Hay una sentencia que suele repetirse en las redacciones y escuelas de periodismo: “No es noticia que un perro muerda a un hombre. La noticia es que un hombre muerda a un perro”.

Argentina, en 2023, ha generado un nuevo ejemplo. Sin perros.

Hablando de jubilaciones, uno podría afirmar que “no es noticia que el Estado le pague el aguinaldo a los jubilados. Sería noticia si los jubilados le pagan el aguinaldo al Estado”.

Lo aclaro, para ir derecho al punto: en 2023, en nuestro país, los jubilados que no cobramos bonos extras (los que estamos “lejos” de la mínima) le pagamos el aguinaldo al Estado.

¿Cómo? Se supone que deberíamos haber cobrado trece “sueldos”, por los doce meses más los dos medio aguinaldos, en junio y diciembre.

¿Y cuántos “salarios” cobramos? Once, en vez de trece.

 Y aclaro, por las dudas, que hablo de ingresos “reales”. Defino como “un sueldo” al ingreso real que tenía en diciembre del 2022. Y por real quiero decir “con el mismo poder adquisitivo”.

En enero del 2023, cuando me pagaron lo mismo (igual importe) que en diciembre 2022 (sin el medio aguinaldo, por supuesto), perdí por la inflación de enero. Cobré menos de un “sueldo”.

En febrero del 2023, cuando me pagaron lo mismo que en diciembre 2022, perdí por las inflaciones de enero y febrero. Cobré menos de un “sueldo”.

En marzo del 2023, cuando me “aumentaron” la jubilación después de un trimestre, me la subieron menos que la inflación del trimestre enero – marzo. Cobré menos de un “sueldo”.

Y así todo el año.

En definitiva, terminé cobrando, en el año, once veces el poder adquisitivo que tenía en diciembre 2022. Once, no trece.

Los dos “sueldos” que se perdieron por el camino, se explican por dos razones:

-las jubilaciones de los “sin bonos” subieron, en el año, un 111% y el costo de vida (IPC Nacional) un 211%. De esto habla todo el mundo. De la reducción del 32% del poder de compra (solo) en el 2023.

-Y la otra fuente de pérdida es la periodicidad de los “incrementos nominales”. Lo que va cayendo nuestro poder adquisitivo mientras esperamos el siguiente incremento (nominal) con la misma jubilación. Lo que llamé la pérdida por el “ajuste Mostaza Merlo», por el paso a paso. Para que se entienda: si nos hubieran ajustado cada seis meses (en vez de cada tres), con el mismo número final, la pérdida hubiera sido mayor para nosotros, los jubilados.

Argentina es un país fantástico, donde te pueden estar diciendo “te aumento el sueldo” (en términos nominales) y te lo están reduciendo (en términos reales, de poder de compra).

En 2023 debimos haber cobrado 13 sueldos. Y cobramos 11.

O sea: en vez de cobrar 12+1, cobramos 12-1.

Nosotros, los jubilados, le pagamos el aguinaldo al Estado.

Hasta la próxima.