Cada tanto hay que apretar F5 en la compu. Todo lo que decimos y hacemos tiene una coordenada de tiempo. Este tema ya fue abordado en un posteo anterior y requiere actualización, ya que Argentina ha reperfilado su deuda en moneda extranjera. En otras palabras, ha “pateado para adelante” la definición acerca de qué pasará con el bono (y no solo con este).

Si querés recordar el posteo inicial sobre este tema, podés hacerlo en:

https://finanzasconhumor.com/2019/06/27/que-compro-cuando-adquiero-un-bono-el-caso-del-ay24/

¿Cuál fue el último cupón pagado del Bonar 2024, conocido en el barrio como AY24? El de noviembre de 2019. ¿Y el primero de los “no abonados”? El de mayo 2020. 

En estos momentos (escribo este posteo el 31 de mayo de 2020), Argentina está en plena renegociación de la deuda (bonos) en moneda extranjera emitidos bajo legislación extranjera.

¿Y el AY24 entra en ese “paquete”? No. Fue emitido bajo legislación argentina. Decida ud. si legislación argentina es o no un oxímoron. Este último comentario ya lo hice, pero dicen en los medios (y es verdad) que el público se renueva. Sigamos.

¿Qué sabemos?

*Que la inversión en bonos es riesgosa, o sea que no tiene un resultado seguro.

*Cuando el “partido viene normal” en un bono, estimamos el flujo de fondos de acuerdo a las normas de emisión de ese bono, algo parecido a lo que en Química llaman “condiciones normales de presión y temperatura”.

*¿Qué probabilidad hay de que se cumpla con las condiciones originales del AY24? Casi cero; hoy es un escenario descartado.

*Por el AY24 Argentina entregará un nuevo bono.

*El flujo de fondos (los cupones) del nuevo bono que darán a cambio del AY24 son desconocidos.

*Sin embargo, el mercado todos los días le pone precio a ese bono de flujo (más que) incierto.

¿Qué toma en cuenta el mercado a la hora de valuar?

Recordemos la idea básica: el precio de un bono es el valor actual de los cupones que restan. O sea que para estimar un precio hay que responder dos preguntas: qué flujo de fondos espero (de lo que quiero valuar) y a qué tasa descuento los flujos (con qué tasa de interés traigo esos flujos futuros estimados a hoy).

¿Cómo hacen para estimar el flujo de fondos, o los cupones del nuevo bono? Miran la renegociación de los bonos bajo legislación extranjera e infieren (sin certeza) a partir de lo que dijo el Ministro Guzmán: que a los bonistas titulares de bonos como el AY24 los tratarán de la misma manera que a los bonos que se renegocian hoy.

¿Y entonces? Siguen observando la renegociación en curso, deducen que Argentina mejorará la oferta y estiman condiciones algo más «dulces» que la de los bonos que inicialmente ofreció Argentina.

Otra vez: (casi) nadie conoce cómo será la oferta argentina por los bonos que hoy está renegociando y tampoco qué ofrecerá (o impondrá) nuestro país por los bonos en moneda extranjera con legislación argentina (como el AY24).

O sea que hay muchas estimaciones dando vueltas para el flujo de fondos del bono que se canjeará por el Bonar 2024. Sin certeza, yo me basaría en lo que apunto a continuación pero, homenajeando a Groucho Marx, aclaro que «estas son mis pautas, pero admito que puede haber muchas otras, también válidas»:

*una quita de capital inferior al 5% (que en el caso de nuestro bono se aplicará al capital que resta amortizar, que son 83,34 usd por cada 100 usd de valor nominal);

*un primer pago de intereses antes de mayo de 2023;

*una tasa de interés creciente arrancando en 0,5% anual o más;

*una amortización en cuotas iguales, arrancando no antes de 2025;

*un bono venciendo no antes de 2030;

*la posibilidad de un endulzante extra, como sería un cupón atado al crecimiento del PBI.

¿Y la tasa de descuento, la famosa Exit Yield?

Acordate que ya escribí sobre esto:

https://finanzasconhumor.com/2020/05/15/renegociacion-de-la-deuda-argentina-que-es-la-exit-yield/

Cierro: si la Exit Yield que se tome para los bonos bajo legislación argentina debe ser la misma que la utilizada para hacer el pricing (estimar precio) de los bonos con ley Nueva York es una cuestión subjetiva y, por lo tanto, cada uno puede tener su respuesta.

Hasta la próxima.